Miguel Reyes, el primer "hincha"

Miguel Reyes, el primer "hincha"

Miguel Prudencio Reyes (1882-1948). Foto: Club Nacional de Football

Según la R.A.E. (Real Academia de la lengua española), un hincha es una “persona que pertenece a la afición de un equipo deportivo y lo sigue con pasión y entusiasmo”.

Veamos la diferencia con un fanático, según la misma R.A.E. un fanático es una “persona que defiende una creencia o una opinión con gran vehemencia o pasión y se muestra intolerante y violento con los que no opinan lo mismo”.

Debemos entonces, hinchar por nuestros equipos sin caer en el fanatismo.

La palabra "hincha" es usada principalmente en los países de habla hispana de Sudamérica.

En Italia un hincha es un “tifoso”, en España es un “forofo”, en Brasil un “torcedor”, en Inglaterra es un “hooligan” (aunque con ese término se conoce más a los hinchas violentos), en México es un "seguidor".

La palabra “hincha” tiene un origen divertido: En los inicios del siglo XX, en Uruguay, el club Nacional contrata a Miguel Reyes, un artesano del cuero, para que haga las labores de utilero, una de ellas, en esa época, era de inflar o hinchar los balones (cosa que se hacía soplando la pelota como un globo). 

Lugar por el que se soplaba o hinchaba la pelota. Foto: Viejos Estadios

Pelota antigua. Foto: Viejos Estadios

Miguel le agarró cariño al trabajo y al equipo, en los partidos se ponía a cantar como el resto de aficionados, pero su voz sobresalía entre las otras (quizás porque sus pulmones se habían fortalecido con el trabajo) y la gente empezó a notar y comentaban “¡Mirá como grita el Hincha!” y luego el término se difundió en todo Uruguay, Argentina y todo Sudamérica.

Miguel Reyes posando con los futbolistas del Nacional uruguayo. Foto: Club Nacional de Football