El partido de Fútbol que desafió a Hitler
El Partido de Fútbol que desafió a Hitler
En 1941, en la 2° Guerra Mundial,
Kiev, capital de Ucrania (que en esa época formaba parte de la URSS) fue
invadida por los alemanes, quienes despojaron a los habitantes de todos sus
bienes y les prohibieron casi todas sus actividades cotidianas.
Una de las cosas prohibidas fue
el fútbol, en Ucrania, el club más famoso era el Dynamo de Kiev, fundado por la
NKVD, la policía comunista soviética.
Un panadero de origen alemán, de apellido
Kordyk, amante del fútbol y del Dynamo, reconoció en la calle a un mendigo, era
el arquero del Dynamo, Mykola Trusevych y le dio trabajo en la panadería.
Trusevych y Kordyk recordaban
mucho las grandes historias de su equipo y tuvieron la idea de reunirlos a
todos y darles trabajo para ocultarlos de los nazis, pero no pudieron encontrar
a todos, pero sí a algunos jugadores del Lokomotiv.
Clandestinamente jugaban algunos
partidos, cambiaron el nombre de Dynamo por Star y a pesar de las pésimas
condiciones físicas ganaron todos los partidos que jugaban, hasta que jugaron
contra unos alemanes y los golearon, los alemanes buscaron un mejor equipo para
enfrentarlos, pero fueron también vencidos.
El Start estaba integrado por
ocho jugadores del Dynamo Kiev (Mykola Trusevych, Mikhail Svyridovskiy, Mykola
Korotkykh, Oleksiy Klimenko, Fedir Tyutchev, Mikhail Putistin, Ivan Kuzmenko y
Makar Goncharenko), y tres jugadores del Lokomotiv Kiev (Vladimir Balakin,
Vasil Sukharev y Mikhail Mielnizhuk).
Algunos nazis propusieron detener
y fusilar a todos los jugadores, pero los altos mandos sabían que eso los
convertiría en héroes, así que decidieron fusilarlos, pero antes se haría un
partido con los mejores jugadores de la Wehrmacht (las fuerzas armadas alemanas),
así se vería la supremacía de la raza alemana, el equipo era el Flakelf, pero
fueron derrotados y pidieron la revancha, y ésta fue preparada con todo para
ganar o ganar.
El 6 de agosto de 1942, en el
estadio Zenit, repleto de autoridades nazis fue el partido que luego sería
conocido como “El partido de la muerte”.
El árbitro, un oficial nazi,
exige que el Star haga el saludo nazi, pero los jugadores saludan con una mano
en el corazón y en lugar de decir “¡Heil
Hitler!” gritaron “¡Fizculthurai!”
(eslogan del gobierno soviético sobre la educación física), ante el asombro de
todos.
El árbitro
permitió todo tipo de fouls, golpes y agresiones de los alemanes, pero igual,
el primer tiempo terminó con el triunfo del Star 2-1.
En el descanso, un oficial alemán
de apellido Eberhardt, entra al vestuario soviético y les dice a los jugadores
que Alemania nunca ha perdido en un territorio ocupado y los amenaza con su
arma.
El segundo tiempo siguió con
golpes de los alemanes, pero los ucranianos no se asustaron, y
jugaron con más ganas; casi al finalizar el partido, cuando el marcador iba 5-3
a favor del Star, Klimenko, delantero ucraniano, se lleva al arquero y para la
pelota en la raya del arco, en vez de empujarla, da vuelta y la patea al centro
de la cancha en un gesto de desprecio lo que hace que las autoridades alemanas
se marchen del estadio.
Una semana después del partido,
los jugadores fueron arrestados y torturados por la Gestapo, acusados de
pertenecer a la NKVD (la policía comunista).
Uno de los futbolistas, Korotkykh
murió al ser torturado, los demás fueron enviados al campo de concentración de
Syrets. Allí fueron asesinados Kuzmenko, Oleksey, Klimenko y Trusevych.
Luego de que Kiev fuera liberado,
a fines de 1943, el periódico Izvestia informó sobre la muerte de los
futbolistas, pero no dijo nada acerca del partido. Los sobrevivientes Tyutchev,
Sviridovskiy y Goncharenko contaron esta historia.
En 1981 cambiaron el nombre del
estadio Zenit por Star y hay un monumento de los jugadores frente a él. La
historia de éstos se enseña en los colegios y son considerados héroes. Los que
cuentan con la entrada de ese partido tienen entrada gratis de por vida para
ver al Dynamo de Kiev.
Vladlen Putistin, hijo de uno de
los jugadores de ese partido, Mijail Putistin, tenía 8 años en ese entonces,
estuvo en el partido, hizo de recogebolas y él cuenta lo siguiente: “No hubo patadas, nadie dijo a los jugadores
que tenían que perder; hubo momentos muy tensos, pero sólo porque el partido
fue intenso, con una gran remontada”. Y que al finalizar los futbolistas de
ambos equipos se tomaron una foto mezclados y sonrientes, “después del partido volvimos a casa y lo celebramos; unos días más
tarde, incluso se jugó otro partido; las detenciones llegaron después”.
El periodista deportivo e historiador
ucraniano Valentin Scherbachov dice: “El
partido de la muerte, como tal, no existió; se disputó una serie de encuentros
que siempre ganaba el equipo local, lo que provocó que en 1942 el nuevo
comandante local prohibiera los partidos para evitar el descrédito de las fuerzas
que ocupaban la ciudad de Kiev”.
También dice que los alemanes eran
militares, tenían muy buen físico, pero no técnica, mientras los soviéticos
tenían un gran nivel futbolístico pero mala condición física.
“El Dynamo era una estructura del NKVD, la policía secreta soviética”
explica el periodista Scherbachov. “Y
fueron precisamente los jugadores del Dynamo: Nicolai Trusevich, Ivan Kuzmenko
y Alexei Klimenko, los que finalmente murieron fusilados”.
El "Partido de la Muerte" se hizo conocido en 1958, cuando
Petro Severov publicó su artículo "El
último duelo" en el periódico "Evening
Kiev". Al año siguiente, Severov, con Naum Khalemsky, publicaron un
libro con el mismo nombre, donde narran la historia del Start.
Se hicieron 2 películas
soviéticas sobre esta historia, “Tercer
Tiempo” y “El Partido de la Muerte”, también 2 películas no
soviéticas, una húngara (“Két félidő un pokolban”, 1963) y una estadounidense
("Escape a la victoria", 1981 con Pelé, Ardiles y Sylvester
Stallone).
Comentarios
Publicar un comentario